El secretario general de la ONU, António Guterres, se mantiene en estrecho contacto con el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Mariano Grossi, quien se encuentra en Ucrania.
Según difundió la oficina del portavoz del máximo representante de Naciones Unidas, Guterres habló por teléfono con Grossi sobre el programa que cumplirá durante su estancia en ese país de Europa del este afectado por el conflicto con Rusia.
El director de la OIEA comunicó al secretario general que la misión que encabeza busca ayudar en el funcionamiento seguro de las instalaciones nucleares de Ucrania.
Por su parte, Guterres reiteró su firme apoyo a los esfuerzos del OIEA y pidió que se conceda al personal de esa entidad en territorio ucraniano acceso seguro y sin restricciones a todas las instalaciones.
Un accidente en una planta de energía nuclear sería una catástrofe para la salud y el medio ambiente, y ante tal escenario deben realizarse todos los esfuerzos posibles para evitar un resultado desastroso, enfatizó el titular de Naciones Unidas.
El director general de la OIEA espera entablar conversaciones con altos funcionarios gubernamentales de Kiev sobre la seguridad de las centrales en Ucrania.
A causa del conflicto militar, las plantas y otras instalaciones con material radiactivo están sometidas a un peligro sin precedentes y debemos tomar medidas urgentes para garantizar que puedan seguir operando de manera tecnológica y físicamente segura, subrayó Grossi.
También pidió reducir el riesgo de un accidente nuclear que podría tener graves consecuencias.
LA OIEA elaboró planes de asistencia para los 15 reactores en cuatro centrales ucranianas, así como la central de Chornóbil, donde se encuentran las instalaciones de gestión de desechos radiactivos tras el accidente de 1986.
