Raúl Delgado Wise explicó cómo la diáspora dominicana participa en los circuitos internacionales de talento avanzado.
Santo Domingo.– Un análisis presentado por el investigador Raúl Delgado Wise reveló que el 56.5 % de las personas de origen dominicano residentes en Estados Unidos cuenta con estudios de posgrado, mientras que en República Dominicana ese nivel educativo apenas alcanza el 2.6 %. El dato llamó la atención durante una conferencia del Instituto Nacional de Migración (INM RD) dedicada a examinar la migración calificada en un escenario global marcado por la revolución del conocimiento.
Delgado Wise es doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Pensilvania, coordinador de la Cátedra Unesco sobre Migración, Desarrollo y Derechos Humanos, y una de las principales referencias internacionales en estudios sobre migración, desarrollo y sistemas de innovación.
El encuentro reunió a especialistas que estudian cómo la diáspora dominicana participa en los circuitos internacionales de talento avanzado. Este contexto resulta clave para entender la creciente movilidad de profesionales que caracterizan al actual capitalismo cognitivo, modelo económico donde el conocimiento, la automatización y el poder de las grandes empresas tecnológicas definen la competitividad global.
Migración del talento
Durante su exposición, Delgado Wise explicó que los sistemas de innovación se transforman con rapidez debido a la internacionalización de la investigación y el desarrollo. Citó ecosistemas como Silicon Valley, que atraen talento del sur global y aceleran procesos de creación tecnológica. También presentó cifras que muestran el aumento sostenido de la movilidad académica: México registra más de 1.64 millones de profesionistas en el extranjero, mientras que uno de cada tres doctorados otorgados en Estados Unidos corresponde a una persona migrante.
El investigador advirtió que la privatización del conocimiento, considerado un bien común intangible, profundiza desigualdades, aunque también evidencia la dependencia del norte hacia el sur en materia científica. Señaló que la migración altamente calificada se ha convertido en un elemento central para la estructura productiva de las potencias y en un factor decisivo para su competitividad.
Estas tendencias, apuntó, representan desafíos significativos para países como República Dominicana, que busca fortalecer la retención de talento y dinamizar su propio sistema de innovación. En ese sentido, la maestra Elba Franco, encargada de la Escuela Nacional de Migración, resaltó los avances en formación especializada, incluida la reciente graduación de 25 profesionales de la Maestría en Políticas Migratorias y Desarrollo en el Caribe.
Franco afirmó que el uso de conocimiento científico resulta esencial para orientar políticas públicas y mejorar la calidad de vida. Añadió que, cuando se gestionan de manera adecuada, las migraciones generan oportunidades económicas, sociales, tecnológicas y culturales.

